Muchas parejas de novios eligen Iglesias, centros de eventos o lugares cerrados para celebrar su matrimonio. Sin embargo, hay quienes prefieren aprovechar los meses de buen tiempo y organizar su boda al aire libre.
Esta es una tendencia que ha ido en aumento entre los novios, sobre todo, si se trata de casarse en lugares como la playa, parcelas, viñas o parques; la ventaja está dada porque los novios sienten más libertad, despreocupación y conexión con la madre naturaleza.
¿Te gustaría un matrimonio así? Te entregamos cinco temas que debes considerar para que no tengas problemas en la organización de su día especial.
En primer lugar es fundamental que se estudie perfectamente el lugar en el que se pretende realizar el matrimonio. Esto es importante, ya que de lo contrario puedes pasar varios malos ratos debido a improvistos propios de realizar una boda al aire libre.
Tanto como el lugar, es necesario tener listo un plan B en caso de que las cosas no resulten como quisieran ¿se imaginan anuncian lluvia a sólo días de su matrimonio al aire libre? Bueno, como eso es absolutamente probable, hay que tener lista una solución para aquel problema.
En los matrimonios al aire libre, el clima es un factor primordial. Por lo mismo, es importante entregar comodidad a los invitados ¿de qué forma? Si hace calor, ofreciendo agua helada o abanicos, si hace frío, bebidas calientes o mantas.
La acústica dentro de todo matrimonio es importante, pero lo es más aún en una al aire libre. Es necesario preocuparse que todos los invitados puedan escuchar de buena forma.
Que las bebidas y alimentos combinen bien con el lugar y el entorno, también es un punto importante dentro del matrimonio al aire libre, ya que, estos deben resistir, y no dañarse si hace mucho calor o no enfriarse si hace mucho frío.